sedentarismo

Calorías que necesita el cuerpo

En primer lugar debemos decirte que las calorías provienen de los alimentos que consumimos, gracias a ellos podemos realizar las actividades diarias, por eso es fundamental saber cuántas necesitaremos para sentirnos bien y para evitar no excedernos en la ingesta y que pasen a formar parte de nuestras cartucheras o barriguita.

Los videojuegos interactivos no sustituyen el ejercicio

videojuegos ejercicioDesde la llegada de la videoconsola Wii de Nintendo al mercado y las sucesivas propuestas de las otras compañías como el Kinect de Xbox o el PS Move de PlayStation se abrió un debate que todavía hoy continúa sobre si pueden o no sustituir el ejercicio físico que debemos realizar para lleva una vida saludable y no sedentaria. Según un último estudio, se ha determinado que los videojuegos interactivos son buenos para la salud pero no llegan a sustituir el ejercicio físico que deben hacer los pequeños. Un jugador llega a gastar casi el 200 por ciento más de energía que cuando juega sentado. También tiene la ventaja de aumentar la tasa cardiovascular y se emplea más oxígeno.

Para los expresos son una buena alternativa para sustituir el ejercicio a corto plazo pero no deben ser tomados como un reemplazo en la actividad física. En estos casos tampoco se deben tomar a los videojuegos como un ocio sedentario.

El peligro del sedentarismo

El sedentarismo es tan peligroso como el tabaco. Ambos pueden llegar a dañar tu salud. La falta de actividad física es uno de los peores enemigos de la salud, lo mismo que el tabaquismo o el exceso de peso. En los últimos tiempos la inactividad física ha aumentado mucho, se estima que en el año 2016 existirán un 64 por ciento de personas más inactivas.

El efecto de la falta de actividad puede general más de una enfermedad no trasmisible, cada vez más peligrosa en todo el mundo. Entre las enfermedades que se pueden contraer encontramos las enfermedades coronarias, cerebro vascular, diabetes tipo 2, cáncer de mama, cáncer de colon y una disminución en la esperanza de vida.